Vivimos en un entorno tan influenciable, que cualquier situación externa la hacemos nuestra como si nosotros la hubiéramos generado. Pero no es así. La mayoría de nuestros pensamientos, no son nuestros realmente. Son de el entorno en que te desenvuelves.
Es importante que estemos siempre atentos a nuestros deseos.
Cuantas veces pasamos la vida luchando por algo, y al final nos damos cuenta de que realmente no valió la pena. Que todo habría sido diferente si hubiéramos hecho eso que realmente nos inspiraba hacer, pero que a mis papas, amigos o personas cercanas no les gustaba. Y nosotros por darles gusto no lo defendimos.
Hoy y todos los dias tenemos la oportunidad de confiar en nosotros y seguir lo que nos nace, lo que nos mueve.
Y entonces termina el sufrimiento, porque todo lo que emprendamos será con todo el gusto y satisfacción.
Hoy es el día. No ayer. No mañana.
La vida es ahorita.
Siente la vida en tu respirar.
Y a hacer lo que SÓLO tu puedes. Tu originalidad.
Cuantas veces he oido hablar de lo complicado que es equilibrar la mente y el corazón!! De que es un eterno problema porque uno obviamente es mas racional y el otro todo sentimental. Aquí el asunto es que a mi consideración, no hemos dado su justo lugar a cada uno, por supuesto cada uno de ellos tiene su porque y para que, cosa que mientras no distingamos nos seguirá generando muchísimos problemas. No digo que sea sencillo hacerlo, he vivido esa parte y soy consciente que esto conlleva trabajo diario y sobre todo CONSCIENCIA. Justamente la consciencia es el equilibrio, ni razón, ni emoción. La verdad de nuestra vida es la realidad de nuestra existencia. Para lo que llegamos a este planeta. Lograr el equilibrio es sencillo, principalmente si ponemos atención a lo que estamos haciendo cada instante, eso es en principio ya que recordemos que nos hemos convertido en unas maquinas hacedoras de cosas en automático, y de hecho ahí ni siquiera pensamos ni sentimos nada, solo hacemos...
Comentarios
Publicar un comentario